Por: MSc. Daniel J. Dorta
Doctorando en gerencia de la universidad Yacambú,
El Tigre Edo. Anzoátegui, Tlf. 0426-5832632, josiacom@gmail.com
Conocer los procesos evolutivos que ha vivido el liderazgo venezolano, no ha sido suficiente para fortalecer esa figura en el ámbito político, evidenciándose esta deficiencia en la lenta evolución del liderazgo político en el país. Los líderes comunitarios y de otras organizaciones son los destinados a entregar su carisma, poder de convencimiento y directrices a cada organización en la búsqueda de su fortalecimiento y del excito organizacional, de ello dependerá su rentabilidad y supervivencia de larga data.
De esos líderes se decantan y seleccionan las autoridades y representantes del gobierno quienes en fin de cuentas organizan, mantienen, reformulan, estructuran y desarrollan las políticas públicas del país. Me animo a interrogar, ¿Qué debe tener un líder público en Venezuela para ser exitoso?, quizás usted se ha hecho la misma pregunta y mantiene una ambigüedad en su contestación, por tal, la respuesta a esa interrogante debería quedar clara al finalizar la lectura del presente artículo. Tras la revisión de un poco de evolución del liderazgo en el país, ejemplificando y contrastando algunos líderes empresariales y su forma de pensar comparandolos a líderes políticos contemporáneos, y reforzando la idea indagando las dadivas que hacen brillar a cualquier líder, espero mantener interesado al lector y animarle a entender las virtudes con que debe contar un líder del gobierno, para entregar a los integrantes de la comunidad de su jurisdicción las facilidades básicas que le permitan vivir en paz, tranquilidad y con comodidad.
El modelo gerencial tradicional en Venezuela se distingue por ser riguroso y vertical, centrado en el poder, con un enfoque inexorable en la toma de decisiones, que comprime la configuración inventiva, automotivadora, equilibrada, responsable demandadas por el mercado imperante. Sin embargo y comentado a Llano (1997), los gerentes que integran las empresas aparentemente están entendiendo que las organizaciones triunfantes se definen por descansar en un novedoso humanismo, encauzado hacia el talento humano, como el capital intelectual más relevante de las mismas, y en donde la toma de decisiones es difundida por lo equipos que conforman la organización. Lo que quiere decir, que el gerente tradicional, ya no se encuentra en aquel ápice impenetrable y aislado de la empresa, la antítesis de esto, es un gerente actual integrado a su equipo de trabajo, que ejecuta una labor inteligente, alineada hacia un sendero de mayor rendimiento y producción. Por tal motivo, se demanda erigir una organización exitosa, se requiere que el gerente/líder, dosifique y reparta su liderazgo hacia todos los niveles de la organización, por cuanto será todo su equipo de colaboradores lo que lo conlleve a alcanzar las metas y objetivos organizacionales propuestos. El auge del liderazgo para el desarrollo de las organizaciones públicas y privadas, en los entornos de constantes y apresurados cambios como los que se viven actualmente en Venezuela, se enfoca necesariamente hacia la supresión de la forma particularizada de ejercer el liderazgo en las organizaciones, conllevando hacia propensiones emergentes propias del liderazgo transformacional, donde coexisten equipos competentes para afrontar revolucionar, transformar y crear soluciones a las dificultades que retan en tiempos de complejidad, incertidumbre y caos. En Venezuela, debido a la cultura imperante, se carece del atributo de un liderazgo gerenciado, por la influencia que todavía ejercen modelos tradicionales de proceso económico cimentados en el caos o anarquía productiva y la plutocracia de Estado. Con todo, las empresas postmodernas producto de la globalización, las TIC´S, la hipermodernidad, han emprendido la distinción con la atención hacia un liderazgo más franco y accesible.
En Latinoamérica, brillan con luz propia los nombres de los venezolanos empresario: Gustavo Cisneros, Eugenio Mendoza, Lorenzo Mendoza, Luís Benshimol, Lorenzo Lara, Alberto Vollmer, Alberto Quirós Corradi, Álvaro Celis, Ali Lenin Aguilera Marciales, Claudio Osorio, Javier Macedo, Antonio Omedas (hijo), Oswaldo Karam Isaac, Oswaldo Karam Maciá, Rafael Alfonso Hernández, Martín Echeverría, Elizabeth Camero, Carlos Egaña, Gonzalo Egaña, Roosevelt y Nury Aguilera Marciales, todos son líderes empresarios y han demostrado ser exitosos, es interesante abordar las cualidades que tienen en común. Tomando el análisis de los empresarios latinoamericanos Diego Arria (1999) "En primer lugar una educación en los Estados Unidos", y en las mejores universidades nacionales y europeas ", la segunda experiencia de trabajo con las empresas multinacionales, y en tercer lugar un sentido de oportunidad para desarrollar sus esfuerzos y utilización de recursos con generación de dividendos, eso, junto con una sensación persistente de innovación y formación, de crecimiento, educación, cultura y el desarrollo. "Las élites técnicas y de gestión en América Latina asociadas con empresas privadas representan un capital por sus condiciones y excepcional talento en el mundo. Sin duda un dramático contraste con la mayoría de los líderes políticos de la región", dice Arria 1999, además comenta de los empresarios latinoamericanos, su formación es muy superior a la de sus padres o sus abuelos dice - porque gracias a ellos, fueron capaces de aprender en los mejores centros de educación en los Estados Unidos y Europa. Los políticos venezolanos hablan el lenguaje de la inclusión, de educación, los valores, la ética, el desarrollo y fortalecimiento del poder popular, pero pocos demuestran mantener niveles educativos apropiados para los puestos gerenciales que ocupan, no poseen programas de apoyo y fortalecimiento e incremento del nivel educativo en los miembros de su comunidad. En contraste veamos, para continuar leyendo el siguiente video.
Citando a Heifetz (1997) desde siempre las audiencias han esperado que quienes ejercen la autoridad en funciones de liderazgo les brinden.
1.- Dirección (D): una visión clara de
hacia dónde ir, claridad con respecto al propósito del sistema, la dinámica,
los objetivos y la forma de abordarlos.
2.- Protección (P): cobijo ante los
enemigos comunes, sensación de solidaridad ante las amenazas, identificación de
amenazas y respuestas. Es fundamental pues genera seguridad y ese valor, desde
los primates hasta la cotidianidad humana, genera lealtad y confianza.
3.- Orden (O): la sensación y el
compromiso de que las conductas deben desplegarse conforme a las normas o, al
menos, al sentido común. Ello permite orientar a las personas, establecer
normas y controlar los conflictos.
4.- Diferencia Simétrica (S): la gente
espera que alguien o algo simbolicen lo opuesto a lo existente, la garantía de
pasar de una página a otra; o sea, lo simétrico con respecto a lo existente.
Esta cuarta expectativa sólo aparece cada cierto tiempo, cuando ocurre un
episodio muy diferenciado en la trayectoria del sistema y éste se encuentra en
declive. Es posible que esta expectativa termine siendo crucial e incluso
compense cierta deficiencia en el grado de satisfacción de las otras
expectativas.
Definido queda entonces que el modelo de liderazgo
en Venezuela debe afrontar dificultades de origen económico, cultural, social,
oposición política, deviación de la atención de los seguidores, como
características propias del gentilicio caribeño nor-suramericano adicional a
las funciones citadas por Heifetz. Ante el excito indefinido de los líderes
públicos, y en aras de responder la pregunta inicialmente formulada en este
artículo, un líder para ser exitoso en Venezuela, debe tener carisma,
elocuencia, poder de convencimiento, poder de persuasión, preparación,
preferiblemente extranjera, experiencias previas, ser perseverante, ser
oportunista y complaciente con las necesidades de sus seguidores, lo que no le
va a asegurar la generación licita de dividendos, pero si puede asegurar la
permanencia prolongada a la cabeza del grupo que le sigue. En otra
oportunidad es preciso desarrollar el tema que permita definir a un líder
venezolano como alguien exitoso, ya que puede ser exitoso alguien con
incontables recursos económicos, o alguien con muchas propiedades, alguien que
posea muchos años en el un mismo cargo público, o simplemente un miembro
de una familia que posee lo suficiente para ser feliz, y no aspira obtener
otras cosas de la vida, a veces el éxito no camina a la par del liderazgo.
Referencias
Arria, D. (1999). Los empresarios
latinoamericanos en el tercer milenio. Venezuela
Analítica Publicaciones.
Davila, E. (S /
F) The family business. Money Website: http://www.dinero.com.ve/188/portada/pioneros.html.
Heifetz R. y Donald L (1997). “The word of leaderships” (El Mundo del Liderazgo). Revista digital de la Universidad
de Harvard.
Llano, C. (1997). “El Postmodernismo de
la empresa”. Mc Graw Hill
Naím, M.
(2004). “Latin America: From complacency to dementia”. ). Latinoamerica, de la complacencia a la
demencia). Diario El País.
Saludos Daniel, interesantes todos los videos realmente Miguel A. Cornejo tiene una forma muy particular de explicar la forma como llegar a los trabajadores ( o como él lo señala: la gente), es indudable que si los trabajadores no están convencidos y enamorados de sus tareas y / o funciones, es difícil para los dirigentes hacerse sentir, para eso es importante que el liderazgo se imponga, de una manera inteligente y con conocimiento de acción.
ResponderEliminarIRMA RODRIGUEZ
Buenas tardes. Es indudable que los cambios a nivel organizacional afectan tanto a las organizaciones del sector público como del privado. En este sentido, la eficiencia y la eficacia no se encuentra reñida con ningún contexto en particular y los indicadores de evaluación pudieran aplicarse, con la inclusión de algunas variables, a ambos sectores. Sin embargo, en la práctica los lideres del sector público se enfrentan a la volatilidad de factores políticos y sociales diferentes que puede llevar a catalogarlos como ineficientes. Las características propias de la Administración pública en Venezuela: inflexible, rígida, normativa y burocrática (en el mal sentido) hacen que las acciones del nivel gerencial se desdibujen en un entramado organizacional en el cual resultados pueden ser muy distintos a los originalmente previstos. A pesar de ello, dos atributos comunes para los lideres de ambos sectores, público y privado, son la ética y el compromiso. Si se tienen afianzados estos dos valores los resultados siempre serán positivos. Saludos, Ana María
ResponderEliminarAcotando a sus ideas expuestas es importante considerar el ajuste de los programas de formación de los líderes en función al contexto donde se desempeña, ya que se ha evidenciado que no se puede aislar y/o definir arbitrariamente las características, conductas o habilidades requeridas por el líder, aún cuando existen algunas ampliamente difundidas y aceptadas, deben ser definidas en base al ambiente que se está estudiando, para evitar la multiplicidad de interpretaciones. Aún cuando parezca contradictorio, es completamente lógico que el líder motorice constantemente el cambio y a la vez busque la adaptación a ellos para poder lograr la armonía y el equilibrio grupal y organizacional. El concepto de líder y liderazgo ha evolucionado en función de las expectativas del mundo cambiante, donde los seres humanos se desplazan en la búsqueda de mejores prácticas y estados de bienestar. Es así como en el Siglo XXI, el resurgimiento del Ser Humano como protagonista del cambio es la bandera para repensar el liderazgo. Aspectos tales como los valores, la calidad del servicio, el aprendizaje e innovación continua, la visión de comunidad, sociedad y mundo se hace imperante en el desempeño del líder.
ResponderEliminarMsc. Naily Rivas
Excelente articulo compañeros......el sabor que me queda luego de leer este interesante articulo es que como siempre nuestra querida Venezuela y su administración es como un LABORATORIO DE PRUEBAS EN MATERIA SOCIO-ECONÓMICA, y todos los investigadores sociólogos y economistas de todo el mundo no seguirán observando y ver el efecto que sobre la población y nuestra economía tendrán todas estas decisiones.
ResponderEliminarLo que si es cierto es una falta total de liderazgo y perdida de confianza del pueblo a las decisiones que se estan tomando....La opinion del pueblo no esta siendo leida en su gusta medida..
excelente articulo..
saludos
Oscar Burgoa